lunes, 3 de diciembre de 2007

Código de ética y aplicabilidad en el quehacer profesional.

Ética y Bioética
La ética es el es el estudio filosófico de la moralidad. Si morales son los deberes y obligaciones de la sociedad, ética son los principios fundamentales de las obligaciones, los por qué del código o sentencia moral.
La bioética por su parte, como disciplina involucrada en la síntesis entre las ciencias preocupadas por la protección y cuidado de la salud humana y los sistemas de valores éticos que se ponen en juego en la vida de las personas; va a recoger los antecedentes socioculturales que condicionan los modos de gestionar la atención de la salud.
Las éticas son normas para determinar lo correcto y lo erróneo y para poder formar juicios sobre que debería hacerse a o en beneficio de otros seres humanos; como no existe una norma arbitraria de lo correcto y lo erróneo, el estudio de la ética ayuda a cada enfermera a identificar sus propias posiciones y desviaciones morales y las prepara para tomar decisiones en dilemas éticos.
Todo acto humano que no se realiza por medio de la voluntad y la libertad, no cabe en el estudio de la ética.
El ser humano, dotado de cuerpo y alma, está llamado a realizar buenos actos, los que son guiados por medio de la conciencia, ésta nos dicta si los actos son correctos o incorrectos y/o justos e injustos. El ser humano, tiende a ser justo, ya que la injusticia trae consigo sentirnos "pasados a llevar". Por medio de la ética, podemos guiar todos nuestros actos hacia aquellos que nos hagan más virtuosos.
Las enfermeras tienen cuatro responsabilidades fundamentales:
-Promover la salud
-Prevenir las enfermedades
-Restaurar la salud
-Aliviar el sufrimiento
La necesidad de cuidados de enfermería es universal.
El respeto por la vida, la dignidad y los derechos del ser humano son condiciones esenciales de la enfermería. No se hará distinción alguna fundada en consideraciones de nacionalidad, raza, religión, color, edad, sexo, opinión política o posición social.
La enfermera proporciona servicios de enfermería al individuo a la familia y a la comunidad, y coordina sus actividades con otros grupos con los que tiene relación
a lo largo de nuestro quehacer, por estos motivos seremos siempre partícipes de las decisiones que a nivel de nuestro equipo de trabajo se tomen o bien, con o sin querer estaremos al tanto de variadas circunstancias que acontecen a los pacientes en que distintas posturas de pensamiento se verán confrontadas y se deberá escoger alguna, de esperarse por supuesto la más correcta.
Consideramos que si bien la conciencia moral o la ética se arraiga en nuestros pensamientos y somos conscientes de ella a partir de nuestra adolescencia, son muchos los factores que intervienen en el pensamiento, sentimientos y actuar de la gente a la hora de tomar una decisión.
Tal vez se reaccione de una manera en que nunca se pensó actuar, pero en nuestro caso sentimos que es tan vital adentrarnos en objetivo de nuestro quehacer, pero no sólo a la parte técnica o a la teórica, una buena enfermera es aquella que además de poseer en primera instancia vocación de servicio, tiene un compromiso y valores éticos muy bien internalizados, que considere la autonomía de sus pacientes, que quiera lo mejor para ellos y evite el mal también.
Una vez consciente de ello deberemos desarrollar la capacidad de enfrentar y solucionar de la manera mas adecuada las distintas situaciones en que nos veremos enfrentadas y solo seremos respaldadas por una base de conocimientos teóricos, morales y prácticos en los cuales somos formadas.
Fuentes de la ética profesional de enfermería
Las fuentes de la ética profesional son las normas destinadas exclusivamente para la prestación de servicio a la sociedad, teniendo como base las más elementales normas sociales. Entre ellas tenemos:
-Normas Jurídicas
-Normas Morales
-Normas de Trato Social
Normas Jurídicas
Se basan en el cumplimiento del conjunto de normas o reglas de conducta de carácter obligatorio que regulan las actividades de los individuos en su convivencia social
Normas morales
La enfermera (o) como profesional debe aceptar la responsabilidad de tomar decisiones y realizar acciones en sociedad, su comportamiento profesional afecta o beneficia a otros miembros de la comunidad, por ello debe ajustarse a las normas de la ética profesional
Normas de trato social
Las enfermeras (os) deben coordinar sus acciones con otros miembros del equipo de salud en la atención al individuo cumpliendo las normas establecidas por la sociedad
La Bioética es la ciencia que estudia los problemas éticos que surgen en la aplicación de la ciencia y la técnica en los ámbitos de la salud.
Los principios de la Bioética son las normas básicas que deben guiar la práctica profesional de las ciencias biomédicas:
Principio de Beneficencia
Significa hacer el bien en todas y cada una de las acciones que se realizan.
Una enfermera practica la beneficencia a partir del momento en que se preocupa y dedica atención preferente a su auto superación para mantener la competencia y desempeño profesional, que le permitirá brindar una atención de calidad.
La enfermera aplica la beneficencia, por ejemplo, cuando, al ejecutar acciones dependientes de las órdenes médicas, ajusta el horario de la administración de los medicamentos no a su comodidad, sino a las necesidades del paciente.
Principio de No Maleficencia
Significa evitar el mal, pues dañar no puede estar presente, de manera consciente, ni en la idea, de un profesional de la salud
Principio de Autonomía
Se define como la aceptación del otro (paciente) como persona responsable y libre para tomar decisiones.
En la práctica, este principio se concreta en el consentimiento informado, el cual consta de dos elementos fundamentales:
-La información
El profesional de la salud es el encargado de proporcionar la información necesaria al paciente de forma comprensible, es decir, con un lenguaje claro y preciso.
-El consentimiento.
El consentimiento es competencia del paciente o de su representante moral (familiar) o legal (tutores, abogados). Este consentimiento debe ser voluntario y el paciente o su representante debe ser competente, tanto física como psicológicamente.
El profesional de la salud se enfrenta, en su ejercicio cotidiano, a una categoría mucho más abarcadora que la autonomía, que es la integridad del paciente como un todo, con sus valores más preciados: la vida y la salud, que incluye además el respeto a su individualidad y a su derecho de libertad de opción.
Principio de Justicia
Se refiere a la denominada "justicia distributiva", es decir, la distribución equitativa de bienes escasos en una comunidad. Justicia significa, a fin de cuentas, dar a cada quien lo suyo, lo merecido, lo propio, lo necesario.
Aunque el mayor énfasis se hace sobre la justicia al nivel de la sociedad y de las instituciones, ello no evade la responsabilidad individual de los profesionales de la salud en la aplicación de este principio de la Bioética.
Cuando una enfermera, al entregar y/o recibir su turno, coloca al sujeto, objeto de su atención, en primer lugar, es decir, cuando entrega y recibe a pacientes y después se ocupa de hacer lo mismo con los objetos y materiales que le servirán para brindarle una atención de calidad a sus pacientes, esa enfermera estará actuando con justicia. Otro tanto sucede cuando la enfermera hace gestiones para conseguir lo más adecuado para realizar las acciones de Enfermería correspondientes.
Justicia significa también no derrochar escasos recursos en un paciente, a sabiendas que esos recursos no variarán un ápice el curso de la evolución de su estadio Terminal, dejando por ello desprotegidos a otros pacientes necesitados y con posibilidades de recuperación.
La enfermera aplica el principio de la justicia, además, cuando, ante una urgencia, atiende al más necesitado de los posibles a recuperar; cuando en una sala de cuidados especiales atiende al más grave; cuando valora las necesidades de un paciente y jerarquiza debidamente la satisfacción de las mismas.
Justicia en salud significa dar a cada quien lo necesario, en el momento preciso, con independencia de su status social y sin reparar en los costos.
Derechos del Paciente
1) El paciente tiene derecho a una atención considerada y respetuosa; a conocer el nombre del médico tratante, así como el de los especialistas responsables por procedimientos y/o tratamientos, además estar informado de los efectos secundarios, riesgos y tendrán derecho a consentir o desistir a ellos. Al rehusarlos deberán tener conciencia de la repercusión que podría resultar por su determinación.
2) El paciente no debe ser engañado y tiene derecho a recibir información clara y apropiada según sus condiciones culturales y psicológicas para enterarse del diagnóstico y pronóstico.
3) El paciente deberá dar su "consentimiento informado" antes de ser sometido a cirugías o procedimientos médicos. Al hallarse mentalmente incapacitado, su poderdante o familiar más cercano darán su autorización o desautorización.
4) Derecho a recibir la mejor asistencia médica posible durante el proceso de la enfermedad y ser respetada su autonomía. En caso de encontrarse en estado Terminal rehusar ser sometido a la agresión tecnológica y terapéutica que solo prolongaría artificialmente la vida.
5) El paciente puede exigir no ser reanimado cardiopulmonarmente (Código No Resucitar).
6) El paciente tiene derecho a leer su historia clínica y conocer los nombres de los medicamentos que le están administrando y el objetivo de ellos.
7) Derecho a conocer y recibir explicaciones sobre los costos de los servicios recibidos. En caso de ingresar por Urgencias, se le debe atender sin exigir pago alguno.
8) Derecho a la privacidad sobre la información que le suministre a su médico quien la recibirá como un secreto profesional y el paciente dará su consentimiento para facilitar datos a las compañías de seguros, como también a los medios de comunicación que los soliciten.
9) Derecho a recibir o rehusar apoyo espiritual o moral, cualquiera que sea el culto religioso que profese.
10) El paciente debe morir libre de dolores, con suficientes analgésicos y tranquilizantes para evitar el desasosiego y la angustia física y mental.
11) Derecho a contar con la presencia y apoyo de sus familiares o allegados.
12) El paciente necesita la comprensión y consuelo de quien lo acompaña ya sean familiares y/o profesionales de la salud quienes defenderán su calidad de vida hasta el final, evitando la frialdad que con frecuencia existe en lugares diseñados para casos agudos, que requiere la creciente tecnología médica.
13) El paciente tiene derecho a no ser abandonado por los profesionales de la salud quienes le seguirán suministrando los medicamentos necesarios para aliviar sus sufrimientos, ya sean en las instituciones médicas como en su hogar.
14) El paciente tiene derecho a morir con dignidad.
Consentimiento informado
No consiste en la capacidad del enfermo de escoger su propio tratamiento. El paciente solo puede escoger alternativas ofrecidas por los profesionales sanitarios, incluido el rechazo del procedimiento.
El consentimiento informado es también un derecho del paciente que crea en el profesional sanitario 3 obligaciones legales previas:
1.- asegurar la capacidad de decisión del paciente.
2.- asegurar la decisión voluntaria y libre
3.- informar al paciente
Excepciones al consentimiento informado
En algunas circunstancias los profesionales no están obligados a obtener el consentimiento informado del paciente para determinar actuaciones. Estas excepciones son:
1.- el interés medico legal (por ejemplo, vacunaciones, pruebas sistemáticas, para el descubrimiento de enfermedades infecciosas en la población, desparasitación en epidemias).
En este caso, aun cuando no sea obligatoria la obtención del consentimiento, el profesional sanitario debe informar al paciente de los procedimientos que se van a realizar y la justificación de los mismos.
2.- urgencia: tanto para salvar la vida del paciente como para evitar grave daño (por ejemplo, accidentes, catástrofes, graves procesos agudos que pueden originar la muerte).
No es obligatorio obtener el consentimiento cuando el paciente es incapaz o no están los familiares presentes o allegados que puedan tomar decisiones subrogadas.
3.- paciente sin capacidad (enfermedades necrológicas o psiquiátricas) sin familiares.
4.- renuncia del paciente a participar y ser informado, dejando la decisión a los familiares o los propios profesionales sanitarios.
5.- privilegio terapéutico: cuando la información que se proporcione al paciente pueda ser negativa o contraproducente, el profesional sanitario puede omitir determinadas informaciones. Es difícil valorar los efectos negativos que puede originar la información que se va a proporcionar y, con frecuencia, se abusa injustificadamente de este privilegio.
Además de estos principios de la Bioética, la ética en la práctica de la Enfermería contempla otros dos principios:
Principio de Fidelidad
Este principio es sinónimo de amor, respeto, compromiso. Ello significa ser fiel a los intereses de los pacientes que se atienden, por encima de cualquier otro interés, siempre que no interfieran con los derechos de otros. Fidelidad al paciente, entendida como el cumplimiento de las obligaciones y compromisos contraídos con el paciente sujeto a su cuidado, entre los cuales se encuentra el guardar el secreto profesional.
El secreto profesional o confidencialidad es la obligación de guardar reserva sobre la información que atañe al paciente que se atiende, mientras éste no autorice a divulgarla o el silencio pueda llevar implícito el daño a terceros.
Principio de Veracidad
La veracidad es otro principio ético que rige el actuar de la enfermera. Este principio ha estado más vinculado con el ejercicio responsable de la profesión. Decir la verdad aunque ésta coloque al profesional en una situación difícil al tener que admitir el haber cometido un error. Sin embargo, valdría la pena reflexionar acerca de las posibles violaciones de este principio, tanto cuando se dicen "mentiras piadosas" al enfermo, contrario a su deseo de saber la verdad, como cuando se oculta el error de un colega u otro profesional, por "compañerismo", y con ello se pone en peligro la salud y hasta la vida de otro ser humano, especialmente de uno que ha confiado esos bienes inapreciables a un profesional de la salud que considera íntegro.
En correspondencia con los principios y virtudes éticas que debe desarrollar un profesional de la salud, y en especial la enfermera (todos los anteriores), sería una verdadera muestra de humanismo el responder, antes de iniciar la atención a cada paciente, las siguientes preguntas:
-¿Qué yo haría, si este paciente fuera mi... (familiar)?
-¿Cómo puedo mitigar su sufrimiento?
-¿Qué es lo mejor para proporcionarle la óptima calidad de vida, en correspondencia con su estado?
-¿En qué puedo ayudar o apoyar esta vida?
El centro de interés profesional enfermero es el cuidado de la persona, considerada como ser humano unitario, integral, poseedor de cultura, y que pertenece a un entorno familiar y social (ser bio-psico-social).
Por tanto, la ética profesional enfermera pretende preservar estos principios bioéticos en la relación enfermera-paciente que se establece en la práctica enfermera.
Análisis critico de la ética en la práctica de enfermería.
Los principios éticos de los que hablábamos antes pueden verse quebrantados en la práctica diaria de enfermería. Veamos algunos ejemplos:
-Falta de información al paciente y a la familia. AUTONOMÍA
-Omisión terapéutica intencionada. BENEFICENCIA
-Confidencialidad de los datos: divulgar información. FIDELIDAD
-Falta de solidaridad y equidad. JUSTICIA
-Registros incompletos, ausentes o pobres. VERACIDAD
-Autoritarismo terapéutico. AUTONOMÍA
-Falta de seguridad para el paciente. NO MALEFICENCIA
-Decisiones de matices subjetivos más que racionales y de carácter técnico. JUSTICIA
-Abandono del paciente. FIDELIDAD
-Rutinización.
-Desactualización sobre nuevos conceptos y tecnología. BENEFICENCIA
-Atención no siempre equitativa. JUSTICIA
-Comunicación escasa con la familia. AUTONOMÍA
A modo de resumen, destacaremos las principales causas que pueden inducir el quebrantamiento de estos principios éticos en las diferentes áreas de la Enfermería:
a) En el área de gestión
La carencia de perfiles definidos para el ejercicio profesional a nivel de todas las instituciones de salud determina que la profesional de enfermería no sea siempre la más idónea para ocupar el cargo.
-Falta de reconocimiento y estímulo.
-Abuso del poder, autoritarismo.
-Liderazgo poco participativo.
-Desconfianza.
b) En el área asistencial
-Desconocimiento u olvido del Código de Ética y Deontología.
-Falta de respeto a la persona, atentando contra su identidad, individualidad e intimidad.
-Prácticas inmorales, ilegales e ilícitas.
-Ausencia de denuncias por mal praxis.
-Desensibilización ante el dolor humano.
-Desarrollo del trabajo en forma individual, no en equipo
c) En el área docente
Se le da capacitación para ejercer la profesión con calidad , basada en aspectos teóricos y tecnológicos, pero falta consistencia ética, que sólo se puede lograr a través de la generación de hábitos buenos, del análisis permanente del comportamiento y a través del razonamiento a la luz de la verdad.
-Vacío en el conocimiento del Código de Ética y Deontología desde los estudios de Enfermería.
-Aplicación pobre de la Ética en la práctica.
-Pobre integración docente asistencial.
-La capacitación no es permanente.

No hay comentarios: